

Reflexión International de SOLIDARIDAD
El Grito de la Tierra
enero 2022 Use this link to print the PDF Version (82 KB)
Introducción
«La tierra está de duelo y se seca. El mundo está agotado y decaído. El cielo y la tierra se debilitan. La tierra ha sido profanada por los pies de sus habitantes que pasaron por alto las leyes, violaron los mandamientos y no cumplieron el contrato eterno». (Isaías 24: 4-5) La Pachamama, como llaman los Indios andinos a la madre tierra, es la principal víctima de los efectos de nuestra sociedad actual sobre el medio ambiente. Se acumulan eventos extremos relacionados con el cambio climático: contaminación en las ciudades, en nuestras fuentes de agua, destrucción de ecosistemas y pérdida de biodiversidad. Ya no es solo la Madre Naturaleza, sino también los pobres los que gritan. Las inundaciones y los incendios no distinguen entre personas y árboles. Un temor podría ser que el cambio climático ingrese a nuestras salas de estar de la misma manera que lo hizo Covid-19, sin perdonar a nadie. Necesitamos empezar de nuevo y detener la autodestrucción. Por eso el Papa Francisco a través de Laudato Si’ nos desafía a buscar un nuevo comienzo, un nuevo paradigma de relación, producción y consumo.
Llamado a la oración
Señor de todo el Universo, expresamos mi amor por nuestra Madre Tierra. Es tu gran amor, que nos envuelve a todos, deseando nuestra felicidad y fraternidad en la Tierra. Hoy la bendecimos a ella y a todo lo que se crea en ella. También le pedimos perdón por el dolor que le hemos infligido. Le hemos saqueado las entrañas y manchado su piel con la sangre de sus hijos. Enséñanos, Padre y Madre, a respetarla y amarla con el mismo amor que tú nos amas. Danos una conciencia justa para lograr la reverencia por todo lo que has creado y así acercarnos a un nuevo amanecer lleno de justicia y paz. ¡Amén! (Oración por la Tierra, Salvador Pérez, Asociado P.R.)
Experiencia
La naturaleza es una fuerza vital sin la cual no podríamos existir. Sin embargo, hemos hecho un vertedero de basura de un paraíso. Hemos provocado la desaparición de quinientas especies de animales. Hemos saqueado el planeta en busca de combustible y carbón. Los números muestran: cada año se pierden entre 46.000 y 58.000 millas cuadradas (120.000 a 150.000 km2) de bosque; 1.400 millones de libras (635 millones de kg) de basura ingresan al océano anualmente. Las enfermedades transmitidas por el agua son una de las principales causas de muerte de niños menores de cinco años, y matan a casi 1.000 bebés cada día. La Amazonía sirve a los intereses económicos de las empresas transnacionales. La sociedad panamazónica es multiétnica, multicultural y multireligiosa. En ella, la disputa por la ocupación del territorio se intensifica cada vez más. (Aparecida No. 8) Las comunidades aborígenes están bajo presión para que abandonen sus tierras para liberarlas para proyectos extractivos y agrícolas que no prestan atención a la degradación de la naturaleza y la cultura. La contaminación ambiental provoca la muerte de 12,6 millones de personas al año, según el informe de (UNEA-2), y las selvas tropicales podrían desaparecer por completo en cien años si continúa el ritmo actual de deforestación. Los desastres provocan daños de grandes dimensiones con graves consecuencias.
Preguntas:
- ¿Cuáles son los gritos de sufrimiento de nuestra Madre Tierra en el país / localidad donde vives?
- ¿Qué acciones personales y comunales está tomando para revertir la crisis climática en defensa de la tierra y el medio ambiente?
- ¿Cómo le desafía el sentido de urgencia de la crisis climática a la luz del futuro que dejará para las próximas generaciones?
Reflexión
Necesitamos tomar conciencia de la situación y actuar para mitigar nuestra huella en el planeta. Los organismos políticos globales deben liderar soluciones. Sin embargo, en nuestro papel de ciudadanos activos, podemos contribuir a mitigar los efectos nocivos de las agresiones sobre el medio ambiente modificando nuestros hábitos de consumo por el bien común. Podemos evaluar la fuente de la energía y los productos que consumimos. Como señala el Papa Francisco, debemos frenar nuestro ritmo frenético de vida para recuperar la capacidad de percibir, contemplar y valorar lo que nos rodea. Debemos liberarnos de la indiferencia consumista que nos impide ver a los que no tienen, del individualismo que nos aísla y adormece, de la superficialidad que nos impide soñar y trabajar por un mundo mejor, de la agresividad que paraliza el diálogo, y de irresponsabilidad de nuestras acciones sobre el medio natural y hacia nuestros hermanos y hermanas. Debemos volver a la ternura, la compasión y la preocupación por las demás personas para amar al mundo y a todas sus criaturas con generosidad y establecer relaciones justas con las demás personas.
Acción
Dado que la tierra y sus recursos son un regalo de Dios para toda la humanidad, considere contemplar al Creador en acción, sea más reverente, justa y económica en el uso de las cosas creadas. Como educadoras en lo que somos y hacemos, aprovechemos todas las oportunidades para educar para una ecología integral y restaurar la relación correcta con la creación. ¿Qué acción más específica puede tomar para ser más consciente y tomar decisiones que preserven y ayuden a proteger el planeta?
Oración
Hoy, nos solidarizamos con la responsabilidad colectiva de todos los seres humanos y elevamos nuestra oración pidiendo perdón a Ti, nuestro Creador. Perdónanos, porque hemos contaminado la atmósfera que nos rodea y protege. Hemos contaminado el agua por nuestra negligencia y egoísmo. Por nuestra culpa, los peces están muriendo y los ríos están sucios e inhabitables. Perdónanos, por la desertificación de nuestra tierra, que hemos hecho estéril para las generaciones futuras en nombre del progreso. Perdónanos, porque no hemos escuchado los gritos de nuestra hermana y madre tierra. Ten piedad de nosotros y nosotras y abre nuestros corazones para contemplar en toda tu creación tu rostro mientras vives entre nosotras y nosotros. Te pedimos tu perdón y bendición. Amén
Preparada por la Hermana Bernardine Fontanez, Provincia de América Latina y el Caribe, para la Red Internacional Shalom.
Diseño gráfico tomado de la Declaración Orientadora, 24º Capítulo General.